Un año atrás, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró a la enfermedad provocada por el virus SARS-CoV-2, COVID-19, como una epidemia mundial. Sin excepción, todas las esferas de la sociedad se vieron obligadas a cambiar el rumbo de sus actividades. 12 meses después, las secuelas continuarán incluso una vez que se haya vacunado a toda la población.
Indudablemente, 2020 fue un año de aprendizaje y quizás la lección más importante es que nada es seguro, especialmente en el mundo de los negocios. Con la incertidumbre que aún preocupa a las empresas, es momento de mirar hacia atrás y revisar cuáles fueron las transformaciones más importantes que provocó la pandemia:
Más cerca de “la Matrix”. La digitalización se convirtió en una necesidad absoluta. Con los consumidores en casa, la respuesta instantánea del sector empresarial consistió en la implementación de tecnología digital. Restaurantes registrados en apps de entrega de comida o pequeños negocios que abrieron un sitio de comercio electrónico son algunos ejemplos sencillos.
El trabajo remoto. Un gran número de organizaciones trasladó a su personal de las tradicionales y equipadas oficinas, a las salas o habitaciones de casas comunes. El home office es una tendencia laboral que para algunas compañías resultó más beneficiosa de lo esperado y es probable que operen bajo esta modalidad para siempre.
Un impacto duradero. En octubre del año pasado, el World Bank Group, una de las entidades bancarias más prestigiosas del mundo, publicó el reporte Unmasking the
Impact of COVID-19 on Businesses. Los datos recolectados abarcan más de 100 mil empresas en 51 países, y su diagnóstico fue que la cicatriz financiera será a largo plazo.
Una mentalidad resiliente. La pandemia puso de relieve lo importante que es contar con un pensamiento abierto al cambio. Las empresas que cambiaron su chip hacía un pensamiento más flexible, tuvieron más probabilidad de mantenerse rentables y tomar decisiones con más rapidez.
Planes de contingencia. Las grandes compañías cuentan con proyectos para mitigar imprevistos, pero la mayoría ni siquiera pensaba que un virus acabaría con sus planes más elaborados. Las empresas se llevaron de tarea realizar una investigación exhaustiva del contexto social, político, ambiental y económico a los que están sujetas para dimensionar cuáles escenarios representan una potencial amenaza de negocios.
Acuerdos de valor
Una última enseñanza es que la unión hace la fuerza. Durante las distintas fases de la pandemia, las empresas encontraron que sus mejores aliados eran otras empresas y que sus distintos servicios se complementaban uno con el otro. Las alianzas que hagas hoy, serán una mano extendida en el futuro.
Acércate a nosotros y descubre por qué seremos un socio estratégico clave. Digitaliza tus métodos de pago gracias a nuestras soluciones omnicanal y también recibe las mejores certificaciones de ciberseguridad. Ten la garantía de que tus ventas en línea y la calidad de tu portal de e-commerce crecerán incluso en la peor de las situaciones.